Ahora que con frecuencia tienes que cubrir la mitad de tu rostro, realza la belleza de lo que muestras. Tu cabellera, tus ojos y cejas, que siempre han sido importantes, adquieren ahora un papel trascendental.
Comencemos por el cabello.
Lo primero es garantizar la salud de tu cabello y para ello lo más importante es mantenerlo hidratado.
Es conocido que en la estructura del cabello el 70% es agua, el 28% son proteínas, siendo la queratina una de las más importantes, y el 2% son lípidos. Es por ello que el contenido adecuado de agua en tu cabello es el elemento clave para que este sea saludable.
Cuando el cabello está deshidratado muestra una imagen menos brillante, será áspero al tacto y presentará una tendencia al encrespamiento; ahí tendrás un aviso urgente de atender la hidratación del mismo. Pero, ojo, no debes esperar a que te llegue este aviso, actúa preventivamente y no permitas que se deshidrate.
Existen diferentes causas que provocan la deshidratación del cabello: agentes químicos como el agua clorada de las piscinas, la sal del mar, los tintes, las decoloraciones, también el cepillado incorrecto, el calor seco, entre otros. Estos agentes actúan sobre la cutícula deteriorándola, las puntas se abren y se pierde el sellado del cabello perdiéndose el agua.
Esto no quiere decir que debas renunciar a la playa, o a lucir el color que te guste ni a ninguna de las acciones que implican la presencia de estos agentes, sólo tienes que utilizar los productos adecuados y establecer una rutina que garantice la hidratación necesaria, incorporando agua y evitando su pérdida.
Algunos Consejos:
Manténte hidratada. Para ello es recomendable ingerir alrededor de 8 vasos de agua diariamente, aunque no sientas sed
Lava tu cabello con la frecuencia necesaria, según lo tengas seco o graso, fino o grueso, cuidando no dañar el pH del mismo. Frota el cuero cabelludo y no el cabello. Usa un dúo de champú y mascarilla que se ajuste a tus necesidades.
Perfecciona tu forma de secado y los equipos que utilizas para el mismo. Una toalla absorbente para dar ligueros toques, sin frotar, elimina una parte del agua y prepara tu cabello para el secador, antes de utilizar este es recomendable aplicar un protector térmico, y con el secador elimina el agua superficial hasta que obtengas la humedad necesaria para el moldeado.
El cepillo es un instrumento muy importante para preservar la salud de tu cabello, elige el adecuado según tu tipo de cabello para conseguir el sellado de la cutícula e incrementar el brillo, aconséjate al respecto con tu estilista de confianza.
Nutre y refuerza la hidratación de tu cabello con productos adecuados a tus necesidades. Los productos de acondicionado sin enjuague, pueden ayudarte a mantener tu cabello saludable.
Garantiza el sellado de la cutícula, disminuyendo su porosidad y evitando las puntas abiertas con productos de finalizado.
Es importante que los Productos de Finalizado y Acondicionado que uses, tengan bajo peso molecular para no apelmazar tu cabello y evitar esa sensación de suciedad tan incómoda.
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Si sigues estos consejos coméntame los resultados y tus ideas al respecto para entre todos construir la rutina Ideal para el Cuidado de nuestro Cabello.
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